El territorio, población, cultura y demás elementos que dan identidad a una sociedad para distinguirse de otras, las tenía el Nuevo Reyno de León antes de 1824; sin embargo, en la conformación de la república, se mutila el nombre al quitarle el término Reyno. Esto no significa que naciera en ese momento el estado, significa que sufrió un cambio.
Para explicarlo mejor. Algunas calles y espacios públicos de Monterrey cambiaron su nombre en el devenir histórico, no por ello nacieron con el cambio de nombre. Priv. Alameda ahora se llama José Marroquín, a 2 de abril se le añade Jesús D. González y a la alameda se le llama Mariano Escobedo.
La división política del Nuevo Reyno de León, plasmada en el plano validado por el gobernador Simón de Herrera y Leiva (en el artículo pasado coloqué Seiba por error) es la misma que ocupó la entidad luego de 1824.
Tampoco Tamaulipas nace en 1824 cuando le quitan el de Nuevo Santander o Jalisco que fue escrito con “X”. Ya se explicó, fue la ideología política lo que motivó a suprimir el término Reyno del nombre en la entidad.
Hablando en términos jurídicos, geográficos y políticos, la nación lo mismo que los estados no nacieron en 1824, lo que nació es el sistema de gobierno republicano y federal, concluye la transición entre el virreinato y el imperio de Iturbide (1821-1824).
Nace la república como organización del Estado mexicano, surgen la federación y la separación de poderes, el sometimiento de los poderes a la Constitución y además un sistema de gobierno democrático.
Afirmar que nace Nuevo León en 1824, es negar su historicidad y cultura previas.
Nuevo León es uno de los veinticinco estados con los cuales se delimita la federación mexicana, es decir la agrupación de territorios “autónomos, libres y soberanos” (entrecomillo porque nunca ha existido la autonomía, libertad o soberanía entre los estados de la federación) sometidos a un poder superior que es el gobierno federal.
El Acta Constitucional de la federación del 31 de enero de 1824 le reconoce como estado, con ello le faculta a elegir su congreso local y valida a su diputado al constituyente federal que promulga la Constitución del 4 de octubre de 1824.
Son lo mismo el Nuevo Reyno de León y Nuevo León, a tal que entre los constituyentes de la república, participa Fray Servando Teresa de Mier, diputado electo por el Nuevo Reyno de León y reconocido al votar el Acta y luego la Constitución que reafirma a Nuevo León como entidad.
Quienes afirman que en mayo 7 de 1824 se reconoce a Nuevo León como estado de la federación en el decreto 45, se equivocan. El reconocimiento y cambio de nombre se establece legalmente en el Acta Constitutiva, el decreto lo que hace es dirigirse a Nuevo León como un estado acreditado al cual le faculta para constituir su congreso local y crear su propia Constitución para la entidad.
Otro elemento que demuestra la no soberanía ni libertad del estado: Es la federación quien le autoriza a constituirse, ¡cuando se es libre no se requiere autorización de otro poder alguno!
El primer constituyente de Nuevo León, ya como parte de la república federal en ciernes, se elige el 9 de julio de 1824 (fuente: archivo del congreso de NL); este poder legislativo designa al gobernador interino Antonio Rodríguez el 11 de agosto del mismo año y promulga la Constitución del estado el 5 de marzo de 1825. Esta Constitución en su artículo primero admite que Nuevo León ocupa el territorio del Nuevo Reyno.
Así se va construyendo la etapa republicana del otrora Nuevo Reyno de León.
** Imagen de portada compartida por el historiador Sócrates Rizzo García.
